Tras acabar de vivir parte de la novena edición del Low Festival o la renombrada #GiganticLow, ponerse a escribir sin tener de fondo la
tralla de The Hives o el groove de Roosevelt se hace imposible.
Un festival que ya está consolidado entre los lowers, que ya no esperamos a que salga el line up para no perdernos el festival pese al
cartel porque los festivales necesitan tener su atmósfera y quien ha ido al low conoce dicha esencia.
Tengas o no tengas Vip Pool, la experiencia en la ciudad de Beniyork se hace como una peregrinación entre los diferentes lowers de todo lo
ancho de nuestro territorio.
Pudimos disfrutar tan solo de las dos jornadas centrales del festival qué nos dejaron con las ganas de finalizar el #GiganticLow debido a
que su ultima jornada en Domingo no esta hecha para Los lowers qué aun no pueden conciliar laboralmente ser festivaleros y Currantes.
Destacar hora a hora y jornada a jornada el maratoniano paseo entre el Escenario Estrella damm (antiguo Budweiser) y Matusalem qué realizamos para ver el máximo de musica en directo no os mostraría una visión crítica del festival por lo que hemos intentado no llegar a la decena de conciertos destacados dentro del festival. Dorian regresó en forma al formato festival tras medio año de paron pero su final coincidía
con el comienzo de Los mallorquines LA que demuestran con su último disco un directo potente y poderoso qué no terminó de lucir debido a
pequeños fallos tecnicos en algunos temas.
La noche era clara vencedora para unos Pixies qué no defraudaron con clásicos como Isla del Encanta, Debaser o Here comes the man que
además no se hicieron esperar a los bises. Un concierto muy potente para un publico qué suele venir al festival por el contenido nacional.
Roosevelt fue la sorpresa de la noche, una mezcla de Delorean a más potencia pese a la poca movilidad del grupo en escena, un grupo Al qué no perder la pista a partir de ahora. Tras ello cerramos la noche con la
energía infinita de !!!( Chkchkchk) qué demostró qué nunca hay que parar de bailar pese a que el Escenario Estrella Damm tuviera mas calvas qué un campo de futbol de tercera división.
La segunda jornada la comenzamos con Sidonie donde demuestran que su directo lleno de clásicos que recuerdan desde El Fluído Gracía hasta
su Peor Grupo del mundo y nunca dejan atrás el gran Sierra y Canadá con el que siempre dan cierre a sus conciertos. La pausa para
coger aire y seguir con Franz Ferdinand se hizo breve pues los escoceses sin Nick a la guitarra derrocharon muchos temas nuevos y
recordaron un Tonight! que echábamos de menos en la formación. La noche seguía ardiendo en el escenario Estrella Damm con la potencia que tanto caracteriza a The Hives con un show de hora y poco que nos supo a nada y menos dada la velocidad y la energía sin descanso de unos rockeros de
verdad.
Nos quedamos con ganas de cerrar un #GiganticLow en una tercera jornada que se marcaba por un conjunto nacional que oscilaba desde el
Trap de Agorazein a los suecos Mando Diao y que nos contaron desde las redes sociales muchos lowers destacando el increíble show visual que
Lori Meyers ha consolidado de manera festivalera.
The Big Low llega el próximo año para celebrar 10 años de un festival que pese a su humedad aplastante todo da igual pues siempre acabas
acudiendo y confirmando que el low se queda para un público ya maduro en cuanto a gusto musical y con un claro perfil de indie nacional con
reminiscencias del britpop del 2000 que siempre consigue este festival traer para amenizar a sus asistentes.